La Torre de Vallferosa en Torà (La Segarra, Lleida). Una gran torre altomedieval de vigilancia única en Europa.

La Torre de Vallferosa en Torà (La Segarra, Lleida). Una gran torre altomedieval de vigilancia en Catalunya, única en Europa.

La gran torre circular prerrománica de Vallferosa. Ubicada a 10 kms de la población de Torà, en la comarca de la Segarra (Lleida, Catalunya), sin duda, es única en Europa. Según investigaciones iniciadas en el año 2016 - a causa de la caída de un rayo en la torre, que requirió una restauración - podría ser mucho más antigua de lo que pensaban (clasificada por la historiografía en los tiempos de la Reconquista); puesto que la prueba del carbono-14, situó la antigüedad de la torre entre el siglo VIII y IX, cuando aún no existía la frontera de la Marca Superior, entre el Al-Ándalus musulmán y el mundo cristiano de los Condados Catalanes ("Comtats Catalans").
Como si de una altísima atalaya medieval se tratara, quizá fue construida para la vigilancia de una ruta, por el interés de las élites dominantes, en el control de los impuestos.
Foto: Wikimedia Commons.

 "En la torre de Vallferosa no parece que haya tenido lugar nunca ningún hecho de armas importante, lo que aunque por un lado ha favorecido su conservación por el otro ha propiciado que no haya sido sino hasta hace muy pocos años cuando se ha puesto de manifiesto su excepcional interés". Artigrama, núm. 24, 2009 .(Memoria de restauración de la torre de Vallferosa). 

La impresionante torre de planta circular, de más de 30m de altura, fue levantada en el margen derecho de un camino medieval, de acceso a la antigua ciudad de Solsona (la Setelsis romana y la Celsona visigoda).

La comarca catalana de la Segarra (Lleida) se estudió en el contexto de los Condados Catalanes, cuando a partir del siglo X-XI se formarían aquellas antiguas poblaciones. Los historiadores creen que las torres de defensa (Torres de guaita) se construyeron para controlar el territorio conquistado, por los condes medievales cristianos, de Catalunya, sobre el Islam, y la formación, durante dos siglos, de una frontera, entre ambos, llamada la Marca o Frontera Superior.

Las villas medievales tendrían un papel organizador del territorio, a partir de un sistema feudal, muy antiguo, que garantizaría la explotación de los territorios conquistados, con la implantación de colonos cristianos, a modo de tapón de las incursiones musulmanas.

La gran torre aparece en un documento de 1052, como Kastrum de Valle Frausa.

A finales del siglo X, se forró la torre antigua, para el engrosamiento de su diámetro, probablemente subiendo unos metros de altura.

"La explicación clásica de la Historia de los actuales territorios de Cataluña propone un largo proceso de reconquista desde las comarcas pirenaicas. El enemigo a batir fue el islam, que había irrumpido de forma violenta y rápida en el 711. La formación de la Marca Hispánica siguiendo la cordillera del Pirineo generaría una zona tampón para proteger el imperio carolingio y, con el tiempo, sería el origen de los condados pirenaicos que formarán los condados catalanes. Su expansión hacia el sur generaría líneas de frontera defendidas por castillos, así como territorios deshabitados o fuera del control condal o islámico. La revisión histórica y arqueológica de este proceso apunta a una realidad diferente en la cual se observa la continuidad de población desde el mundo antiguo, aunque con una forma de organización diferente. Los estudios arqueológicos y análisis de 14C nos indican que construcciones militares hasta ahora explicadas como fortificaciones de la frontera feudal son muy anteriores, por lo cual el relato histórico ha de ser revisado profundamente. Son los ejemplos de Santa Perpètua de Gaià y Vallferosa." Joan Menchon Bes. Treballs d'Arqueologia, 2018, Nº 22. 

Riu Llobregós. Afluente del gran río de Lleida, el Segre. Atraviesa el norte de la comarca de la Segarra, por Torà, donde se ubicó la primitiva Torre de Vallferosa. 

La Geografía de la Segarra está condicionada por colinas de entre 400m y 850m, entre valles, torrentes, ríos y rieras.

Foto: Josep Maria Santesmasses.

"A finales del siglo X, un cambio de poder en el centro de la estructura de la fuerza musulmana en la Península Ibérica, propició el desmembramiento del Califato de Córdoba en los reinos de Taifas. Esta situación fue nuevamente aprovechada por los diferentes condados (catalanes) situados en el cauce del Río Llobregós para avanzar rápidamente por la actual Segarra." Montserrat Pérez Serra.

Torre de Vallferosa. Las torres redondas supusieron un desarrollo respecto a las rectangulares, siendo más resistentes, y, sin ángulos, para evitar a los atacantes sorpresa. Las formas circulares permitieron a aquellas personas, levantar altísimas torres, con menor volumen de obra, consiguiendo mejores resultados. 

Las torres fueron elevadas sobre grandes basamentos de sillares de piedra.

  Foto: Wikiprojecte. 

En principio, las Torres de Guaita  (de Wahta, en lengua franca) fueron construidas por las guarniciones militares, formadas por una decena de soldados, quienes se encargaron de su construcción. Para ello, contaban con los abundantes recursos forestales de la Segarra, en la Alta Edad Media.

La construcción de una torre de tanta envergadura requirió de mucha madera y esfuerzo humano. Este material es conocido por los técnicos como material ligneo. Para su obtención, según cálculos de los expertos, se desforestaban unas 90 hectáreas de bosque, formando un círculo, alrededor de la torre. Dicha área perimetral, continuamente era controlada, y limpiada de malezas, con el fin de que los enemigos, no pudieran camuflarse entre los matorrales o árboles.

El bosque ofreció los recursos, al mismo tiempo que las personas medievales en Europa, se esforzaron por retroceder su espesor, al considerarlo un lugar muy temido en la Alta Edad Media, donde habitaban seres malignos, caníbales y bestias.  Cuando el bosque se espesaba mucho, por sí mismo, formaba una auténtica frontera, un lugar por donde se circuló con gran dificultad, tal y como explican los textos medievales, con zarzas y espinas tóxicas, sólo apto para criaturas salvajes y tenebrosas. Por consiguiente, cuando asentaban poblaciones humanas, cortaban tantos árboles como requería un perímetro de seguridad, utilizando la madera para todo tipo de construcciones, talando bosques enteros, a pesar de todo ello, hemos de imaginarnos una Edad Media boscosa, comparada con la nuestra actual, totalmente desforestada.

La torre funcionaba como una atalaya de vigilancia, desde donde se controlaban: los caminos, con el tránsito de las personas; los posibles invasores, y las otras torres.

El material ligneo, empleado para construir las torres, evolucionó a material más sólido, el material pétreo, cada vez más frecuente y mejor consolidado, incluso con la fabricación de argamasa hidráulica, compuesta de: arena, cal y cerámica machacada, y, sillares de piedras del lugar (como el gres, las calcáreas y los conglomerados). El reforzamiento de su estructura interior se realizaría teóricamente, a mitad del siglo XI, siendo la última reforma que tuvo la torre, que permanecería intacta hasta los restauradores actuales.

La torre presenta elementos defensivos externos, tales como estrechas aspilleras para disparar flechas, sin ser vistos, ni alcanzados, organizadas en dobles hiladas de seis, colocadas en la parte superior de la construcción, siguiendo el esquema de elevación, para aportar mayor seguridad. Las oberturas de una torre medieval redonda, tan antigua, siempre son muy escasas, para no romper el bloque del edificio, confiriendo estabilidad, y, al mismo tiempo, aportando mayor protección frente a los ataques.

Otro de los elementos, es la sencilla puerta dentelada de acceso, muy elevada con respecto al suelo, situada a unos 7 metros de altura, que da acceso a la segunda planta de la torre.

A la puerta se accedió mediante una escalera móvil, que era replegada en el interior, al anochecer o la señal de alerta, frente a las tinieblas y los peligros altomedievales.

La importante construcción defensiva cuenta tres pisos y está estructurada en seis niveles, de los cuales, el nivel II corresponde a una letrina, elemento único, en una torre tan antigua.

Nos encontramos con una torre con pisos y compartimentos, bien construida y estructurada. El nivel IV y el V son cadalsos arquitectónicos y el VI, corresponde con la terraza, donde se encuentra el punto más alto, coronado por las almenas, los elementos arquitectónicos defensivos, que encierran un cierto simbolismo, en el mundo medieval cristiano; donde las azoteas de las torres, semejan coronas, como símbolo del poder de la alta nobleza, del rey y de Cristo, en el caso de que la torre fuera construida por cristianos.

En la primera planta, se encontraba la zona de almacenamiento, de los víveres para la subsistencia de la guarnición militar, y la leña. Aunque es probable, que también fuera usada como una cárcel.

En la segunda planta, donde dormían los habitantes de la torre, aparece una larga escalera, como acceso directo para las guardias y subir cuando era necesario, a la terraza, para otear y controlar el territorio.

La excepcional torre, fue declarada por la Ley de Patrimonio, Bien Cultural de Interés Nacional, en 1985.

Foto: Enciclopèdia Catalana.

"La Torre de Vallferosa, un tesoro arquitectónico único en Cataluña. Su situación es peculiar: hundida en un valle, rodeada de un bosque salvaje, pero dominando el paso que lleva de las tierras llanas del interior hacia el Prepirineo. Es la "Vallis Frausa" (Vallferosa) vía de comunicación, paso de ganado, lugar de pugnas por el territorio ... la torre lo vela, lo vigila, lo vigilancia. Pero, quien construyó la torre? Cuando? como? Hasta hace poco se consideraba construida en el siglo X, época de la repoblación cristiano de las tierras reconquistadas a los sarracenos. Sin embargo, estudios arqueológicos recientes, encargados por la Generalitat, la datan en el siglo VIII. Este descubrimiento aumenta su valor y singularidad, situándola en época aún de dominio y administración musulmana. Es una torre de planta circular, constituida por un muro interior y otro exterior, tiene 4 niveles y terraza, una cámara de combate, dos líneas de cadafales e incluso una letrina. Se encuentra en un excelente estado de conservación y las intervenciones que se han realizando, manteniendo sus características originales, permiten visitar su interior. (...) Es un edificio hermoso e imponente, de 33 metros de altura y 13 de diámetro, situado en el término municipal de Torà, en la Segarra, e integrado en el que había sido el núcleo del pueblo de Vallferosa. A los pies de la torre hay un pequeño cementerio, a su lado la iglesia de San Pedro, de estilo barroco, más allá la antigua rectoría, un callejón, unas casas ... Todo ahora en ruinas, excepto la magnífica torre , que ha continuado en pie a pesar del paso de los años. En el lugar encontramos restos de construcciones romanas y de un poblado medieval ". Ajuntament de Torà.

Iglesia barroca de Sant Pere de Vallferosa. La "Torre Rodona de Vallferosa" del término municipal de Torà de Riubregós, se encuentra cerca de los restos de un antiguo pueblo "fantasma", que fue definitivamente abandonado durante la Guerra Civil Española (1936-1939).

Interior de la Iglesia barroca, en ruinas de Sant Pere de Vallferosa. En el centro había una imagen de Sant Pere (San Pedro) que se encuentra desaparecida.
Fotos: PMR Maeyaert/Wikimedia Commons.