África en la Europa medieval.

 África en la Europa medieval.

Ménsula del Palau de la Generalitat de Catalunya en la ciudad de Barcelona, en la fachada principal del Carrer del Bisbe, con la representación de la cabeza de una persona de rasgos de África subsahariana. Algunos autores creen que se trata de la representación de una persona negra más antigua de Barcelona.
Este elemento secundario forma parte del diseño original del siglo XV, para la construcción de la fachada más suntuosa del Palau de la Generalitat de Barcelona, sede del gobierno de Catalunya, como prueba del poder de las instituciones. 
Autores atribuidos de la obra escultórica de la fachada: Marc Safont y Pere Joan, realizada entre 1416 y 1419. Probablemente represente a un esclavo. 
A partir del siglo XIV, la esclavitud entra en las grandes ciudades portuarias del Mediterráneo, como Barcelona, a consecuencia de las grandes rutas comerciales.

La representación de África y lo africano se insertó de formas múltiples en la Europa medieval, tanto en lo real como en lo imaginario: en su bestiario, en la condenación y las guerras, en los exotismos y en la desafortunada esclavitud, signo del desarrollo mercantil, confiriendo continuidad al mundo antiguo. De hecho, la esclavitud nunca desapareció. 

Los primeros esclavos y esclavas africanos que entraron por el Mediterráneo podrían ser musulmanes, puesto que a partir del siglo XIV, en las confrontaciones entre cristianos y musulmanes, ambos se toman como esclavos y cautivos. Hasta mediados del siglo XIV estos esclavos eran producto de los botines de guerras y saqueos, sin olvidar la piratería y los mercenarios, no tanto del tráfico comercial, como sucederá muy posteriormente. Del año 1350 al 1450, los historiadores pueden denominar, estos cien años como el siglo de oro de la esclavitud en las regiones del Mediterráneo.

Europa obtuvo del continente africano grandes aportaciones, no sólo económicas, sino también imprescindibles en la filosofía, el simbolismo y el arte, la religión y la ciencia.

"los bizantinos, los musulmanes o los occidentales, que han desechado cualquier otra tradición, toman de algunas fuentes (de África) su visión del mundo (...) Historia de la Humanidad Unesco.

Para los geógrafos medievales, tanto cristianos como musulmanes, África era considerada un continente legendario, de límites no bien definidos, que se prolongaba hacia India y China.

"Para casi todos los geógrafos medievales de Oriente y Occidente, África se extiende desmesuradamente, sobre poco más o menos 200 grados de longitud, desde las Islas Afortunadas al oeste hasta el sur de Asia. De modo que el océano Índico se transforma en otro Mediterráneo.
(...) Por lo tanto, todos los hombres cultivados de la Edad Media occidental u oriental aceptan en general que África se prolonga a lo largo de los paralelos hasta enfrentar a la India o China. A lo largo de esta costa interminable se distribuyen los pueblos y las regiones". Historia de la Humanidad Unesco.

Mapamundi del salterio de la Abadía de Westminster. Siglo XIII. Imagen: British Library. 
Los mapamundis medievales occidentales incluyen referencias al mundo cristiano, como el jardín del Edén, representado como una circunferencia en el lado Este. En el centro se situaba la ciudad celestial, Jerusalén, mientras que la ciudad de Roma aparece en un nivel ligeramente inferior.
Cristo sostiene el orbe, símbolo del mundo y la realeza divina, flanqueado entre dos ángeles. En el siglo XIII la representación del globo terráqueo forma una T, dividiendo en tres partes el mundo, con los continentes de Asia, Europa y África.
En el mapa aparece representado el Mar Rojo, de gran importancia en el mundo medieval, por su relación con la ciudad del Norte de Egipto, Alejandría, cuna de la cultura antigua, que después de la catástrofe en la Antigüedad, vio su renacimiento bajo el dominio islámico.

"Centro comercial medieval que bajo dominio islámico fue una de las mayores metrópolis mediterráneas. Tras un largo declive hasta el 827, Alejandría resurgió como gran metrópoli en la época de las Cruzadas y vivió un período floreciente gracias al comercio, con convenios con los aragoneses, genoveses y venecianos que distribuían los productos llegados de Oriente a través del mar Rojo. En 1365 la ciudad fue brutalmente saqueada tras ser tomada por los cruzados dirigidos por el rey Pedro I de Chipre. En los siglos xiv y xv, Venecia eliminó a la competencia y su almacén alejandrino se convirtió en el centro de la distribución de especias hasta que los portugueses abrieron la ruta del Cabo en 1498, fecha que marca el declive comercial, agravado por la invasión turca". Alejandría. Vocabulario de Comercio medieval. Universidad de Múrcia.

"El Nilo plantea difíciles problemas a toda la tradición cultural originaria de la antigüedad. Identificado por la exégesis bíblica con el Geon que sale del Paraíso, su curso que llega a Oriente, se confunde un tanto con el curso del Ganges y del Indo; una parte de los geógrafos musulmanes repite este tema." Historia de la Humanidad Unesco.

"Ninguna civilización medieval ha evitado los "mirabilia", los únicos capaces de explicar los secretos de un mundo que todavía no está acabado, y de justificar la lentitud  con que el hombre consigue descubrirlo" Historia de la Humanidad Unesco.

En los siglos de las cruzadas, el color negro y lo relativo a los infieles entrará en la condenación. Hemos de tener presente que la Edad Media no es una unidad geográfica, ni un siglo, sino varios siglos con características propias, donde las ideas se mueven entre los pobladores de Europa, África y Asia, fijándose según conveniencia de los poderosos de reinos e imperios, por las fructíferas relaciones comerciales, que en tiempos de crisis, guerras y epidemias sufren bloqueos, pudiendo radicalizarse.

El santo negro martirizado en el siglo III. San Mauricio el tebano y el papa. Retablo procedente de Alemania, Bohemia, año 1420 Imagen: Black in Western Art Research. San Mauricio fue el santo patrón de los emperadores del Sacro Imperio Germánico.

Estatua de San Mauricio en la Catedral de Magdeburgo. Año 1350. En esta escultura San Mauricio aparece con la armadura (a veces es representado como un moro). Sus atributos son el estandarte y la palma de mártir cristiano. Es patrón de Suiza, Francia y Alemania, de los tintoreros, fabricantes de telas, espaderos y militares.

Quizá más interesantes que los santos y obispos negros podrían ser las llamadas Vírgenes Negras, que según algunos autores parecen tener una relación con las diosas madres africanas, en particular con la diosa egipcia Isis. Las vírgenes fueron una asimilación de cultos ancestrales a las diosas madre. No hemos de olvidar que el cristianismo entra en el Mediterráneo procedente de Egipto, y esta tradición, sin duda lo vincularía. Las primeras vírgenes del paleocristianismo eran mujeres santas veneradas por las primeras comunidades. Aparecen documentadas en la necrópolis paleocristiana de la ciudad romana de Tarraco (Tarragona).

"Las Vírgenes Negras son un tipo de imágenes que siguen contando hoy con gran devoción. Se trata de esculturas o pinturas donde María tiene la piel negra o de color oscuro, bien porque se hicieron ex professo en ese color, bien porque con el paso del tiempo se oscurecieron lo que les dotaba de un halo de antigüedad que hizo que se pensaran que estaban hechas por San Lucas. (...) desde finales del siglo XI al siglo XIII podemos documentar un auge de este tipo de imágenes, que está muy vinculados a los numerosos comentarios sobre el Cantar de los Cantares que hizo San Bernardo de Claraval, donde se habla de “morenota soy, y linda” en un tono afectivo que ha sido ampliamente debatido por la investigación." Ana Valtierra UCM.

La famosa imagen de la Verge de Montserrat. Talla románica del siglo XII. Para algunos restauradores quizá el color ennegrecido sería el resultado de la combustión de los cirios y de la suciedad del paso del tiempo, y de otras restauraciones antiguas.
La Virgen cristiana asimiló a las antiguas diosas madres africanas y de Próximo Oriente, zonas geográficas consideradas por la Historia, cuna de la Humanidad, de la civilización, y a partir de la Antigüedad Tardía, de la cultura cristiana.

"Las razas no existen, ni biológicamente ni científicamente. Los hombres (y las mujeres) por su origen común, pertenecen al mismo repertorio genético. Las variaciones que podemos constatar no son el resultado de genes diferentes. Si de "razas" se tratara, hay una sola "raza": la humana". J.M. Gonzáles.

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