Los orígenes de Roma. Tito Livio: el historiador del orgullo romano.

Los orígenes de Roma de Tito Livio. Ab Urbe Condita (Liber I). El clásico del patriotismo romano.


Estatua de pedestal con la representación del famoso historiador romano Tito Livio (64 o 59 a.C. - 17 d.C.) del artista Pietro Danieletti, en Pádua, realizada en el año 1776.  La inscripción de la escultura reza: "TITO LIVIO PATAVINO" haciendo referencia al gentilicio de su localidad de origen: la Pádua romana (Patavium). Cuando Tito Livio nació, la ciudad era una de las más importantes de la Italia romana.
Patavium fue considerada una ciudad itálica orgullosa de la tradición, entroncada con la Guerra de Troya.

Foto: 
Fondazione Cini/ Fototeca Ist. di Storia dell'Arte.

En el año 2017, la Universidad de Pádua realizó el proyecto "Operazione canaletta", en ocasión de la celebración del bimilenario de la muerte del historiador romano Tito Livio, para rescatar del canal, los restos sumergidos del teatro romano, en la isla Memmia.
Foto: Universidad de Pádua / 
Dipartimento di Beni Culturali dell’Università di Padova.


Tito Livio, procedente de la Italia septentrional, recibió una esmerada educación, que le convirtió en el gran escritor de la Historia de Roma.
De su vida privada se conocen algunos detalles, como que contrajo matrimonio y tuvo dos hijos, uno de los cuales, debió fallecer pronto, porque los dos hermanos llevaron el mismo praenomen, situación que no era posible estando los dos vivos.
Aunque no se conocen con precisión los hechos, ni como contactó con Augusto, la labor de historiador de Roma le condujo a la Urbs. Su vida finalizó en su ciudad natal, Patavium (Pádua).

El contexto de su vida, se sitúa en los tiempos del primer emperador de Roma, Augusto, cuyo reinado ha sido considerado, el siglo de oro de las letras y las artes, cuando Mecenas protegió a los poetas. La élite de la intelectualidad romana, se caracterizó tanto por su pesimismo, como por su deseo de Paz. Pese a que Augusto apodó a Tito Livio (por la costumbre romana de otorgar motes a los personajes) pompeianus, en relación a su ideología republicana moderada, heredada por tradición de los aristócratas romanos, su historiador, estaba al servicio de la restauración de Roma.

El autor se propuso, y consiguió su objetivo de elevar a la gloria el pueblo romano. Livio scriptor historicus desarrolló sus innegables cualidades, tales como: patriotismo, honestidad, elocuencia, moralidad y perfección, que le entronizaron en la categoría de un clásico entre los romanos. 
"La utilidad placentera y fecunda del estudio de la Historia, consiste también en el hecho de que os es posible admirar brillantes ejemplos de todo tipo, de los cuales podréis extraer lo bueno para vosotros y para vuestra patria y rechazar cuanto haya en ellos de oprobioso." Tito Livio.
Los libros de Tito Livio, no son a nuestro parecer, una obra científica de Historia; sin embargo, la consideramos una importante fuente histórica, al mismo tiempo que la contemplamos como una obra de arte.
" El lenguaje, frecuentemente poético y tendiente a lo arcaico, tiene una fascinación que nunca cede". Luigi Pareti (1885-1962). Importante historiador y arqueólogo italiano.
Su obra monumental, constaría de 142 libros, desde la llegada de Eneas (el hijo de Afrodita que llegó a ser rey de Troya) a la península italiana, hasta el año 9 d.C.
De tanta grandeza escrita, sólo nos han llegado 35 libros. Los diez primeros, los más importantes para el estudio de la Roma antigua,  abarcaron hasta el año 293 a.C. También se conservaron algunos fragmentos y exposiciones de casi todos los volúmenes (excepto el número 136 y el 137). 

Las diversas críticas realizadas por los historiadores contemporáneos, exponen su falta de verificación; creen que no utilizó los documentos originales y antiguos, que todavía se encontraban en Roma, basando su trabajo, en fuentes posteriores y por lo tanto menos creíbles, como las de los tiempos de Sila, escogidas principalmente por su retórica; remarcan su mala reconstrucción de la tradición, con la yuxtaposición de hechos contradictorios; además de interpretaciones erróneas y malas traducciones, que efectuaría de las escasas fuentes griegas utilizadas. 

En el estudio de todas las fuentes escritas de la Antigüedad, siempre será recomendable, desarrollar un análisis crítico, no siendo Tito Livio una excepción, porque como apuntó el historiador ruso Kovaliov (1886-1960), "raramente Livio llegó a la crítica histórica". 

Hermoso y delicado torso de Rea Silvia, la madre humana de Rómulo y Remo, en el Museo Arqueológico de Cartagena (Murcia, España). 
Hija del rey de Alba, Numitor. Fue una sacerdotisa virgen de las vestales, que infringió la ley de su templo, para tener relaciones con el dios Marte. Al quedar embarazada del dios de la guerra romano, su tío Amulio, el usurpador del trono de su padre, la condenó a ser encarcelada, por temor a que el fruto de su vientre pudiera convertirse en rey. Finalmente, su tío la arrojó al río. Algunas leyendas contaron que fue divinizada, y rescatada de las aguas por el dios del río (Tiber).
Foto: Wikimedia Commons. 


Escultura romana con la representación del río Tíber como dios (Tiberinus, Tiberino). Muestra un hombre mayor y barbudo, con el cuerno de la abundancia (cornucopia) y los gemelos cerca de él.
En el monte Capitolio, la colina sagrada de la antigua Roma, donde se elevó el templo más importante de Roma dedicado a Júpiter.
El dios Tiberino, en un principio fue una alegoría, para pasar a ser un rey de Alba Longa (ciudad muy antigua que entró en conflicto con Roma), Tiberino Silvio, que murió luchando junto al río Tíber.
"(...) en estos parajes habían vastas extensiones solitarias. Dice la tradición que el escaso caudal de agua había depositado en lugar seco la cuna flotante donde habían estado expuestos los niños, y que una loba sedienta bajó de las montañas que hay cerca, atraída por los llantos infantiles: ella, doblándose, ofreció sus ubres a los niños con tanta mansedumbre que un pastor del rebaño real la encontró lamiendo a los recién nacidos con la lengua. Dicen que el pastor se llamaba Faústulo. Él los llevó a su cabaña y los entregó a su mujer Larencia para que los criara. Algunos creen que Larencia era llamada "loba" entre los pastores, porque había prostituido su cuerpo: de aquí proviene el origen de esta tradición y de este prodigio." Tito Livio. Ab Urbe Condita Liber I.
Luperca, la loba de bronce, en los Museos Capitolinos. Los gemelos serían un añadido posterior del S. XV.  Aunque anteriormente se pensó era de procedencia estrusca, la escultura de la loba podría haber sido realizada en la Edad Media.
Según la tradición la loba amamantó a Rómulo y Remo, los futuros fundadores de Roma.
Los dos hermanos decidieron fundar una ciudad donde habían sido rescatados, en algún lugar entre el Monte Aventino y el Monte Palatino (entre las 7 colinas de Roma). No sabiendo que colina escoger, Remo se situó en el Aventino y Rómulo en el Palatino, siendo Rómulo el favorecido por los dioses, para iniciar la construcción de la ciudad. Remo, molesto, entró en el espacio sagrado de la fundación de la ciudad, donde estaba prohibido el acceso; por tal sacrilegio, su hermano gemelo Rómulo enfurecido, le asesina, enterrándole en el Aventino.
Foto: Wikimedia Commons.

Didracma de plata. Tipo de moneda de época republicana romana del S. III a.C.
En el anverso se representó la testa de Hércules, con una cinta en su cabello, con sus emblemas, el garrote y la piel del león de Nemea sobre su hombro. En el reverso de la moneda se ha grabado la loba amamantando a los míticos gemelos Rómulo y Remo. La Inscripción en latín dice "ROMAN (O).
Según opinión del experto conservador del British Museum, estas representaciones tendrían relación con los cónsules de Roma en el año 269 a.C.: Fabio y Ogulnius.
Foto: British Museum

"Allí (Monte Palatino) Evandro, de la raza de los arcadios, que había habitado aquella región mucho tiempo antes, había importado la ceremonia de la Arcadia, instituyendo que unos jóvenes corrieran desnudos para diversión y haciendo barrilada en señal de veneración a Pan Liceo".  Tito Livio. Ab Urbe Condita Liber I.
Pavimento de mosaico romano con la representación de la cabeza del dios Pan. Período del reinado de los Antoninos (S. II d.C.) de la Villa de Genazzano. Pudo haber pertenecido al propio emperador Marco Aurelio o a su coemperador Lucio Vero.
Tito Livio contó que en aquellos tiempos ya se realizaron en el Monte Palatino las celebraciones de las Lupercales, unas fiestas religiosas de mediados de febrero, en honor del dios Fauno, para propiciar la fertilidad de los campos, el ganado y las personas.
Fauno, fue asimilado por los romanos, al dios griego de la Arcadia, Pan.
Foto: Marie-Lan Nguyen / 
Museo nazionale romano di Palazzo Massimo.

Rómulo, al matar a su hermano gemelo Remo, exclamaría:
" Así acabará, a partir de ahora, cualquiera que salte mis murallas" 
" De este modo Rómulo obtuvo el poder para sí mismo: la ciudad acabada de fundar, se llamó según el nombre de su fundador." 
Tito Livio. Ab Urbe Condita Liber I.
El rapto de las sabinas de Jacques-Louis David (1799).
Cuando Rómulo fundó la ciudad necesitaba poblarla; ante la escasez de mujeres, Rómulo decidió raptarlas. Con este fin, organizó unos juegos a los que invitó a los pueblos vecinos, solicitando que fueran acompañados de sus mujeres e hijos. Mientras celebraban los juegos, los romanos raptaron a las mujeres solteras, dando causa a una guerra, en la que fueron vencidos los pueblos menores, excepto los más importantes, los sabinos. Para ser favorecido por los dioses, Rómulo construyó un templo a Júpiter "el que detiene la huida". Por participación del dios Jano, surgió un torrente de agua caliente que hizo retirar a los sabinos.
Otra versión, la que se aprecia en el cuadro del genial pintor neoclásico, muestra a las mujeres intercediendo en el frente de la batalla, rogando a sus padres y maridos el fin de la guerra.
Finalmente los sabinos reinaron en Roma con Rómulo, hasta que murió su rey, Tito Tacio, y continuó reinando el latino Rómulo, hasta el fin de sus días.
Foto: Wikimedia Commons.



Restos de los cimientos del Templo de Jupiter Capitolino (Jupiter Optimus Maximus) en los Museos Capitolinos. El templo fue iniciado por el rey Tarquinio Prisco y finalizado por el último rey de Roma. Tarquinio el Soberbio.
Foto: Wikimedia Commons.

Relieve de mármol del s. II d.C. Eneas y su hijo Iulius (Ascanio) contemplan a la cerda, bajo la higuera sagrada Ruminal, donde también se cobijaron los gemelos y la loba, supuesto lugar de la fundación de Roma.
Eneas llegó al Lacio, y a su muerte, le sucedió su hijo Ascanio, unos treinta años después fundaría la ciudad de Alba Longa, donde sería llevado prisionero Remo.
Foto: Marie-Lan Nguyen / Wikimedia Commons / British Museum.

"La leyenda de los orígenes de Roma es doble y responde a contextos y épocas diferentes. Una parte tiene como protagonista al troyano Eneas colonizador del Lacio; la otra a Rómulo, fundador de Roma". J. Sayas Abengochea (UCM).



La fundación de Roma, el 21 de abril de 753 a. C., se inició con el reinado del rey latino Rómulo, a base de enfrentamientos con los pueblos itálicos. La monarquía romana quedó sumida en los mitos. Le siguió una alternancia de reyes de diversas procedencias, a los que se atribuyeron cualidades y aportaciones a la civilización, conocidos como los Seis Reyes de Roma: Numa (sabino), Tulio Hostilio (latino), Anco Marcio (sabino), Tarquinio Prisco (etrusco), Servio Tulio (latino o etrusco) y el último rey, Tarquinio el Soberbio, famoso por su crueldad.

"Empezó a reinar Lucio Tarquinio, quien recibió el sobrenombre de Soberbio por sus actos, porque, como yerno, prohibió que su suegro fuera enterrado argumentando que Rómulo también era insepulto, y, además, mató a los senadores principales que creía habían defendido los intereses de Servio (Tulio)". Tito Livio. Ab Urbe Condita Liber I.


Comentarios

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    La monarquía romana quedó sumida en los mitos. Le siguió una alternancia de reyes de diversas procedencias, a los que se atribuyeron cualidades y aportaciones a la civilización, conocidos como los Seis Reyes de Roma: Numa (sabino), Tulio Hostilio (latino), Anco Marcio (sabino), Tarquinio Prisco (etrusco), Servio Tulio (latino o etrusco) y el último rey, Tarquinio el Soberbio, famoso por su crueldad.

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